Diálogo de una copa que no es copa

Esto NO es un Martini

 

 

 

-¿Alguien había pensado en ello?

-Si. Lo pensé. Es una imagen refrescante, un Martini blanco con un trozo de naranja, hielo y no se, parece una aceituna

-¿Recuerda lo de la pipa de Magritte? Pues eso. Es lo mismo pero en foto. Una representación fotográfica de esa quimera de sofisticado bebercio a la que llamamos Martini Bianco. Mejor en italiano. Y disculpe la publicidad pero, ¿quién dice vermú a secas? 

-¿?

-¡Ah!, que no sabe quién es Magritte. No importa. En lo demás ha acertado excepto en una cosa. El verde claro del fondo, sobre el verde oscuro de la copa no es una aceituna, ni siquiera una corteza de de limón sino una rodaja de pepino pinchada por… Una fórmula líquida de mi invención que…
 

-Un palillo. Pinchada por un palillo. Lo veo. Pero, aunque no sea un Martini lo parece. Además, siento ya su narcótico poder en mi paladar; el frescor de los hielos en mis labios empapados de esas gotas de agua infiltradas por el sabor de ese gajo de naranja y de ese impensable pepino.
 

-Pues sepa que son dos palillos y que yo no le he invitado a beber ni siquiera a dialogar, solo le he mostrado una imagen tomada con un celular sobre una invención líquida en una sociedad líquida…
 

-¿Celular? ¿Cuántas células? ¿Vivas o artificiales? ¿Sociedad? ¿Qué sociedad?
 

-…
 

Disculpen. La inteligencia artificial la hemos creado nosotros.